La atención plena o Mindfulness puede ser muy útil en momentos de conflicto interno, lucha y cambios de vida. Hacer frente a la pérdida de una extremidad es algo que puede resultar difícil y muchas veces, abrumador. Así como el mindfulness ayuda a muchos a gestionar el estrés, esta práctica también puede mejorar la calidad de vida de una persona amputada.
Antes de empezar, comprendamos qué es el mindfulness
El Mindfulness puede considerarse una filosofía de vida que incluye la práctica de la meditación como una actividad de autocontrol destinada a regular el cuerpo y la mente hacia un estado de relajación.
Una investigación publicada en la revista Journal of Internal Medicine reveló que la meditación reporta mejoras en la memoria, la capacidad de concentración, la autoconciencia y la inteligencia emocional.
El Mindfulness se basa en el modo en el que manejamos nuestro foco atencional, por esta razón también se le llama atención plena. Este estado de meditación recrea el momento presente y pretende liberar la mente de pensamientos negativos.
¿Cómo puede ayudarme el Mindfulness siendo una persona amputada? – Pon en práctica estos 5 tips.
La práctica del Mindfulness tiene el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas de manera demostrable logrando un profundo estado de conciencia para mejorar la forma de pensar, lo cual es útil cuando se está tratando de encontrar el lado positivo en todo lo que la vida te brinda.
Practicar Mindfulness evitará que te sientas atascado o que te llenes de pensamientos negativos.
Para ayudarnos a practicar mindfulness de la manera correcta, recurrimos al libro de Jon Kabat-Zinn, Vivir con plenitud. A continuación, se encuentran aquellos puntos que consideramos relevantes para mejorar la vida de una persona amputada.
1. Aceptación, soltar y no esforzarse
Estas tres actitudes te ayudarán a vivir el momento y a soltar el deseo de intentar controlarlo todo. Lo más importante es que asumir estas actitudes ayuda a liberar espacio en tu mente para encontrar formas de avanzar. Recuerda que hacer lo contrario (empujar o aferrarse emocionalmente a algo) no te ayudará a alcanzar la paz mental.
2. Reconoce que estás comenzando
Comenzar tu vida como persona con amputación es, en muchos sentidos, un reinicio y tendrás que volver a aprender a hacer muchas cosas. Reconocer que estás comenzando, te permitirá ver la vida con otros ojos, seguir adelante con tu rehabilitación y vivir la vida de una manera completamente nueva.
3. Aprenderás a ser paciente
En nuestra vida cotidiana, la paciencia suele ser extremadamente escasa. Como persona con amputación, ser paciente contigo mismo y con tu progreso, es crucial para que te recuperes y sigas adelante con tu vida.
No te olvides que estás reiniciando y tu cuerpo está tratando de aprender como hacer las cosas de otra manera, por lo que necesita tiempo para volver a aprender cosas básicas como caminar o subir escaleras.
4. Confía en ti mismo
Confiar en ti mismo es poderoso y te ayudará a enfrentar cualquier desafío que se te presente. Cuando tienes confianza en ti mismo, se te facilitará confiar más en otras personas, lo cual es crucial, ya que necesitarás confiar en tu profesional de atención médica y protésica para trabajar juntos en un objetivo común.
5. Gratitud y generosidad
Ser grato y generoso te brindan alegría e incluso aprecio por cada situación desafiante que seguramente enfrentarás en tu nueva vida. Estas actitudes fomentan un clima positivo facilitando el trabajo de tu equipo médico y aumentando la confianza en ti mismo.
En conclusión
Al participar en estas prácticas de Mindfulness e integrarlas en tu vida, podrás aprender a manejar el dolor crónico, reducir la ansiedad y los sentimientos de pánico, y mejorar la calidad general de tu vida, tus relaciones y el entorno social.
¿Cuándo practicar el Mindfulness?
Idealmente, el Mindfulness debería practicarse durante media hora al día, aunque se recomienda comenzar con sesiones de no más de diez minutos, para ir aclimatando la mente a las nuevas sensaciones e ir construyendo poco a poco estados mentales de meditación.
Si nos propasamos con el tiempo al principio, es fácil que terminemos frustrados al dedicar mucho tiempo a algo que aún no sabemos hacer bien, y terminemos abandonando esta práctica.
¿Con qué ejercicio puedo empezar?
Se puede empezar concentrando la atención en la respiración. La respiración es un acto cíclico que nos mantiene conectados en todo momento con el presente. Normalmente respiramos de manera automática e inconsciente, por lo que tomar consciencia y poder modular nuestra respiración nos brindará un mayor autocontrol sobre nosotros mismos.
Un ejercicio de respiración que puedes practicar es:
- Estírate boca arriba sobre una superficie estable y rígida
- Coloca una mano sobre tu pecho, a la altura de tu corazón, y otra sobre tu vientre.
- Puedes colocar música para meditar o estar en silencio
- Cierra los ojos y empieza a inspirar por tu nariz, lleva el aire hacia tu vientre, sintiendo cómo se hincha.
- Amplía la capacidad llevando aire hacia tu pecho. Hazlo despacio, contando los segundos, aguanta durante 2 segundos la respiración.
- Comienza a expirar por la boca lentamente durante los mismos segundos que tardaste en inspirar.
Repite este proceso durante unos minutos.
¿Qué rol tiene el Mindfulness en el tratamiento del dolor crónico?
Los episodios de dolor son imposibles de evitar; uno debe aprender a convivir con ellos y encontrar la forma de manejarlos dentro de lo posible. No olvidemos que el Mindfulness nos invita a aceptar la realidad tal como es.
La aplicación del Mindfulness en pacientes con dolor crónico se basa en la idea de que puede ayudar a aceptar el dolor. Varios estudios han demostrado que las personas que practican Mindfulness sienten menos dolor, presentan una mayor calidad de vida y sufren menos emociones negativas.
Esto demuestra que si sufres algún cuadro de dolor crónico, por muy incapacitante que sea, es posible aprender a manejarlo y convivir con él.
Si te interesa profundizar en este tema te invitamos a consultar las siguientes referencias bibliográficas:
- Terapias Psicológicas para el Tratamiento del Dolor Crónico. Ver referencia
-Con la revisión de la Fisioterapeuta Yadelmar Bell
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